Festival de Sitges (Barcelona). 2017. El encuentro de Cine Fantástico de Cataluña, que reúne a cinéfilos de todo el mundo, trae este año como padrino un director muy especial. Guillermo del Toro, maestro de este tipo de cinematografía, se convertirá en el protagonista del Festival en un aniversario para recordar: 50 años de Cine Fantástico en Sitges. Pero, ¿sabemos realmente quién es Guillermo del Toro y por qué su nombre es tan remarcado como para estar en los Festivales y Premios más importantes de todo el globo?
Guillermo del Toro, asediado por sus fans. Fotografía de Carlos García Campillo.
Del Toro nació el 9 de octubre del año 1964 en Guadalajara, Jalisco (México). En este sentido, desde muy pequeño se interesó por la cinematografía, llegando a utilizar una Super 8 de su padre con menos de diez años de vida. Del Toro, sin embargo, en una de sus entrevistas con el programa CALA, de la CNN en Miami, nunca pensó en llegar a donde ha llegado en los últimos años. “He llegado a este mundo por algo accidental”, dice. Y es que, si no hubiese conocido a Almodóvar, quizás no estaría produciendo o dirigiendo todos los filmes que ha realizado hasta ahora. Cuesta trabajo creer que, naciendo en el seno de una familia católica conservadora, haya llegado a la fama por sus trabajos con monstruos y seres fantásticos. Él mismo lo cuenta: “es a la vez una atracción y un miedo”. Este director nació con el monstruo a su lado: “desde la cuna tengo sueños lúcidos, y veía a los monstruos y cosas raras justo enfrente de mí».
Tras su paso por el Centro de Investigación y Estudios Cinematográficos, que se encuentra en Guadalajara, su lugar de origen, se interesó primeramente por el maquillaje (no es de extrañar teniendo en cuenta el diseño peculiar de todas sus hazañas cinematográficas). Ya entrando en la veintena, creó su compañía Necropia. Quién diría que un muchacho fuese productor ejecutivo de prestigio en México con tan solo 21 años de edad. Posteriormente, se le unió Tequila Gang como compañía de producción de películas. Su primer film fue “Doña Herlinda y su hijo”. Ya desde muy temprano, se supo que Guillermo del Toro iba a ser polémico con sus creaciones. En esta película, habla ya de la homosexualidad y de las tensiones familiares que provoca la madre del protagonista por esta misma razón. En estos momentos, no habían aparecido todavía sus famosos monstruos.
Pero no todo ha sido tan fácil en la vida de Del Toro. Aunque su carrera profesional esté rodeada de éxitos y tempranas acciones que le llevaron a lo más alto de la cima de los mejores directores del planeta, su padre fue secuestrado en un momento de tensión política mexicana, en el año 1998. Tras rescatarlo después de 72 días de cautiverio, decidió empezar de nuevo en EEUU. Actualmente, reside en Los Ángeles.
A partir del momento en que despegó su inmersión como director y productor dentro del mundillo cinéfilo, su éxito no dejó de crecer. Una de sus principales películas fue “El laberinto del fauno”, conocida sobre todo en España por el protagonismo de actores de esta nacionalidad. Ganó un Bafta por Mejor Película de habla no inglesa en 2006, un Goya a mejor guion original y tres Óscar (mejor dirección artística, mejor maquillaje, mejor dirección de Fotografía) en el año 2007. Iba a dirigir la adaptación de Tolkien, El Hobbit, aunque por problemas financieros solamente hizo de guionista en esta trilogía. Siempre con características similares en cuanto a diseño y manera de enfocar las películas hacia lo fantástico, imaginativo e irracional (aunque con mucha representación simbólica, como él diría). Destacamos también Pacific Rim, de ciencia ficción, que recaudó más de 400 millones de euros, o «La Cumbre Escarlata», acercándose al género del romance pero con el toque característico de terror.
La cumbre escarlata. Fotografía de: Craig Duffy
Ha participado ya en el Festival de Cannes del año pasado (2015) como jurado. Pero no solamente conocemos a Del Toro por las películas que (co)produjo o dirigió, sino que también es polifacético en este ámbito. Se le conoce también por ser guionista de múltiples proyectos; como novelista (Nocturna, 2009; Oscura, 2010) y ha intentado comercializar algún videojuego como INSANE, aunque al final no lo consiguió.
Creativo, serio y trabajador, en cada una de sus entrevistas contesta como a un familiar y siempre esboza una sonrisa tímida, aunque sincera. Sensato y realista. Es incrédulo con la existencia de los monstruos y fenómenos paranormales, aunque afirma haber visto el fantasma de su tío. Es ateo, aunque espiritual. Es un hombre interesante, con ganas de aprender en todo momento y con la teoría de que “siempre estamos fluyendo”. Un hombre que entiende a sus criaturas como “una suerte de filosofía de imágenes o ideas de monstruos que representan cosas para mí”. Son “algo simbólico”. Adquirió asimismo una casa a la que llamó “La Casa Triste”, a modo de despacho, con miles de metros cuadrados de librerías y con enanos por los pasillos. Resulta complicado creer que no forme parte de este mundo, sino que simplemente lo tome como algo producto de la creatividad de alguien, y, sobre todo, algo que pueda ser explicado como representación de una cuestión o elemento existencial.
Del Toro, con su personalidad arrolladora y su imaginación sin límites, ha llegado a crear mundos que podrían estar guardados bajo llave en la mente inquieta de un niño. Con la llegada de este Festival de Cine Fantástico de Sitges (Cataluña) en su 50 aniversario, han escogido a uno de los mejores representantes de este género ficcional y, sobre todo, a alguien con el alma de un soñador que no para de sorprender con sus extravagantes personajes de cuento.
«Para mí el cine consiste en entender la vida mediante la fabulación. Es la posibilidad de entender más lo que somos, dónde estamos y el porqué. La gran verdad que contiene toda narrativa se manifiesta en el cine a través de la vista y el oído. Se llega emocionalmente a tener una vivencia cuando se adentra uno lo suficiente en la película. Se tiene la oportunidad de viajara lugares donde nunca has estado y se conoce a gente que nunca conocerías. El cine es lo más cercano a la magia».
Guillermo del Toro
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Un reportaje de: Helena Sampedro González
La guayaba mecánica 